Nomadismos tecnológicos – Giselle Beiguelman, Jorge La Ferla
Nomadismos Tecnológicos. Dispositivos móviles. Usos masivos y prácticas artísticas
Giselle Beiguelman, Jorge La Ferla (compiladores)
Editorial Ariel – Colección Fundación Telefónica
Buenos Aires, 2010
INTRODUCCIÓN
POR UNA CRÍTICA DE LAS ARTES TECNOLÓGICAS MÓVILES
Por Giselle Beiguelman y Jorge La Ferla
Esta publicación es testimonio del simposio Nomadismos tecnológicos, primer resultado de la colaboración entre el Espacio Fundación Telefónica y el Instituto Sergio Motta. Un proyecto que responde a las políticas de ambas instituciones para incentivar las artes tecnológicas a partir de una praxis de estudio, promoción de obras, llamado a concursos y premios nacionales, y la realización de estos encuentros que convocan a artistas y teóricos. La invitación para esta conferencia de Buenos Aires ha buscado reunir referentes internacionales que se destacan en el pensamiento sobre los usos masivos y la práctica artística con las tecnologías móviles. Esta compilación de sus textos propone un recorrido intelectual y crítico, que brinda un panorama de análisis conceptual sobre este aspecto crucial de las relaciones entre los medios de comunicación y las variables de creación artística con dispositivos tecnológicos.
Frente a una acuciante cuestión de fondo, como es el banal discurso sobre la novedad y el progreso, que redunda en la pérdida de la singularidad en los estudios de las artes mediáticas, este proyecto se afirma en la transmisión de un conocimiento, que proviene de una gama de especialistas e investigadores que interpretan críticamente los dispositivos móviles. En una compleja coyuntura marcada por cambios tecnológicos radicales en los medios masivos de comunicación, recordaremos la primera década el tercer milenio por la preponderancia de las máquinas de comunicación móvil convertidas en la principal interfaz cultural. El traslado de la computadora personal hacia dispositivos portátiles donde confluyen el GPS, la telefonía y el audiovisual nos remite a la producción y recepción de textos, imágenes y sonidos, a mecanismos de control y seguimiento, y a la formación de redes sociales reconfiguradas para los dispositivos locativos. Este conjunto de temas dominó el primer día del simposio que dio origen a este libro.
Bajo esta perspectiva, el profesor André Lemos, de la Universidade Federal da Bahia, uno de los nombres más expresivos de la emergente crítica de la cibercultura, elabora una reflexión histórica y filosófica sobre la noción de movilidad, para situarla en el campo de las telecomunicaciones contemporáneas, donde se constituye como una experiencia cultural del cotidiano de la red. El análisis macroscópico de Lemos recibe un trato puntual por parte de Alejandro Artopoulos. Miembro, junto a Hernán Galperín, del equipo coordinado por Manuel Castells que examina el impacto de las telecomunicaciones en la juventud latinoamericana, este investigador argentino presenta aquí datos inéditos sobre la experiencia de la movilidad entre los jóvenes de Sudamérica, introduciendo nuevos aportes metodológicos para los trabajos futuros sobre las relaciones entre tecnología, comportamiento y estudios culturales. Multiplicando las perspectivas de análisis del fenómeno de la movilidad, en tanto dato cultural y elemento de sociabilidad contemporánea, Wendy Hui Kyong Chun, investigadora y profesora de la Brown University, indaga las formas de organización en red –imaginarias y reales– en el contexto del nomadismo tecnológico, poniendo énfasis en la situación de la juventud de Corea del Sur.
Estas discusiones reciben un trato original por parte de Marcus Bastos, curador de la exposición Geografías celulares, que se realizó durante la misma época en el Espacio Fundación Telefónica, quien aborda en su ensayo las ambivalencias económicas de la cultura de la movilidad, en aquello que apunta, simultáneamente, hacia nuevos formatos de capital creativo y reproducibilidad técnica. Por su parte, Tim Cresswell, geógrafo y profesor del Royal Holloway, University of London, analiza la experiencia de la movilidad en el contexto de las teorías de la ciencia, formulando conceptos que colocan las comunicaciones en diálogo con la física y la filosofía contemporáneas. También comprometida con la investigación filosófica y epistemológica se encuentra la refl exión encarada por Mariela Yeregui. En esta dirección, la artista y directora de la maestría en Artes Electrónicas de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF), Argentina, discute cómo las interfaces electrónicas móviles proponen nuevas dimensiones para la definición del cuerpo y cómo éste se vincula a otros cuerpos en su entorno espacial.
Nombre de referencia en la crítica de medios, la famosa semióloga Lucia Santaella realiza un análisis crítico de las relaciones entre vigilancia y medios locativos, como también de su potencial creativo, confrontando estrategias de control del imaginario con proyectos artísticos innovadores. Expandiendo críticamente estos abordajes, Nelson Brissac Peixoto, filósofo y curador del proyecto Arte/Cidade, sitúa de forma original las artes con medios móviles en la historia del arte contemporáneo, a partir de una visión relacional entre obras comprometidas con nuevos abordajes del espacio y de las escalas territoriales. Finalizando este primer bloque de discusiones, Martha Ladly, investigadora sénior de tecnologías móviles y presidenta del Comité de Ética del Ontario College of Art and Design, muestra cómo los dispositivos móviles pasaron de ser instrumentos militares a ser instrumentos de transformación de la esfera pública en los espacios urbanos.
El segundo día del simposio Nomadismos tecnológicos estuvo dedicado a los impactos artísticos de la cultura de la movilidad. No por casualidad, parte del análisis crítico de los textos se focaliza en el uso de los medios de comunicación como herramientas artísticas, que vuelve necesario seguir pensando estas máquinas semióticas como ideológicas para una coyuntura en que los aparatos se presentan exclusivamente bajo la forma de productos con marcas corporativas. Estas mercancías, desarrolladas bajo el marco comercial, excedieron defi nitivamente la dimensión de lo nacional en los procesos de diseño, fabricación y difusión. Aquellos científicos, inventores y empresarios independientes, tan típicos del siglo XIX, ya han sido desplazados por ingenieros, técnicos y diseñadores, anónimos salariados ligados a compañías de electrodomésticos y empresas de comunicaciones. La excepción son los mismos servicios de telefonía, fuertemente ligados a las empresas locales que proveen el servicio. Desde las amenas actividades lúdicas en vivo hasta los festivales audiovisuales pensados a medida de los dispositivos móviles, pasando por la demagógica entrega de aparatos a comunidades carentes, suelen ser recibidos con beneplácito por las empresas dedicadas a la fabricación de celulares o que brindan servicios de comunicación, pues ofrecen un panorama utilitario a partir de los usos amigables de estos bienes de consumo masivos y globales que proponen ciertos artistas.
Por eso otra de las líneas principales de este libro analiza la apropiación de esta tecnología por parte de los artistas, algo que no implica necesariamente una desviación de los destinos corporativos de estas
máquinas, sino más bien su afirmación. Además, como acentúa Lucas Bambozzi, siempre queda una sensación de desilusión, una vez expuestas las propuestas artísticas concentradas en estas tecnologías, con respecto a las expectativas que podían concitar. Este escepticismo frente a las incumplidas promesas de los usos artísticos de las nuevas tecnologías, que se prolonga en la creencia en los publicitados beneficios de la sociedad de la información y las redes sociales, es desmenuzado por este corpus textual, que plantea un panorama analítico trascendente a partir de una razón crítica sobre el impacto ideológico y formal de las tecnologías de comunicación móviles en el arte y la cultura. El aparente desencanto, y el
elogio desmedido de los resultados artísticos, en los ejemplos que muchos mencionan, encuentran una solidez conceptual en varios de estos escritos.
No menos importantes que estos análisis más escépticos son las consideraciones de Wolfgang Schäffner, uno de los más importantes historiadores de la ciencia, profesor de la UBA y de la Universidad
Humboldt de Berlín, quien defiende la tesis de que la explosión en el consumo de celulares con cámara y pantalla implicó el surgimiento de un nuevo paradigma audiovisual que se tornó referencia para la producción de imágenes en la actualidad. En la misma línea de pensamiento se mueve la reflexión de Andrea Di Castro, artista y profesor de La Esmeralda y fundador del Centro Multimedia de la Ciudad de México, que muestra cómo la computadora contenida en el teléfono celular es un laboratorio
de expresión por el cual pasan las tendencias expresivas contemporáneas. Aproximando la discusión al escenario socioeconómico de Sudamérica, David McIntosh, profesor del Ontario College of Art and Design, examina diferentes formas de construcción del tiempo en las culturas de pueblos originarios de América, tradicionalmente inmovilizados por la exclusión de las comunicaciones tecnológicas, pero que, actualmente, se están apropiando de los sistemas de comunicación digital y rediseñándolos para
reivindicar su memoria y su historia.
Por otro lado, el aura progresista que conlleva la idea de vanguardia de las artes mediáticas encuentra un espacio de conflicto en la era de los dispositivos wireless, y puede ser discutida, pues suele permanecer
cautiva marca de origen y se constituye en testimonio de una globalización dudosa y cuestionada. Muchos autores ponen en tela de juicio los paradigmas de la portabilidad en las prácticas culturales y artísticas, en consideraciones críticas que van desde el origen militar de los inventos tecnológicos hasta un mundo de fronteras infranqueables donde cada vez es más difícil desplazarse de sur a norte. Como señala Beiguelman, “en ese contexto, las ideas de nomadismo y movilidad, aunque son centrales en el campo de la contracultura y de las micropolíticas, asumen preponderancia en las estrategias de marketing y ventas, resultando ser dispositivos de domesticación del imaginario. Por eso es fundamental cuestionar esas imágenes, para pensar el agenciamiento y las posibilidades de cambios culturales en la era de la movilidad”.
El objetivo de este proyecto editorial es compartir las propuestas expuestas durante el simposio Nomadismos tecnológicos por las personalidades participantes, pertenecientes a diversos campos de la academia, que exponen un análisis crítico alejado de cualquier visión coyuntural. El alto impacto cultural y predominio masivo de las tecnologías móviles aún no es objeto de estudio académico y refl exión crítica, particularmente en Hispanoamérica. Por eso es que esta propuesta editorial pretende abrir un espacio de teoría y crítica en este campo del pensamiento.